La integrante del Bloque de Resistencia y Rebeldía Popular (BRRP), Marisela Ramírez, dijo a VOCES que, a su juicio, el desfile anunciado por el presidente Nayib Bukele en el mismo horario y trayecto es un boicot contra la libertad de expresión y manifestación.
“Lo leemos como un boicot y como un atentado en contra de quienes queremos pronunciarnos en contra de las decisiones autoritarias y desmedidas del gobierno contra los sectores populares”, aseveró Ramírez.
Distintas organizaciones feministas, sindicales y defensoras de derechos humanos ya habían convocado previamente para marchar el 15 de septiembre. Sin embargo, el presidente anunció recientemente que se desarrollará un desfile oficial donde centros escolares, bandas de paz, bomberos y otros grupos partirán desde la Plaza del Divino Salvador hasta el parque Cuscatlán, dirección contraria a las de las organizaciones.
“Esto tiene una intencionalidad y es tratar de confrontar a los niños y niñas que salen en desfile con la gente que está siendo convocado para la marcha que vamos a realizar”, señaló Ramírez.
Ramírez mencionó que en marchas anteriores existió una amenaza de decomiso a los medios de transporte para evitar la movilidad a manifestantes y que en el contexto actual se suma al ambiente hostil contra las organizaciones y el régimen de excepción junto a un discurso de señalización a pertenecer a grupos delictivos.
Una práctica regular del gobierno en manifestaciones anteriores ha sido la utilización de retenes policiales en puntos de entrada a San Salvador, evitando que algunos buses lleguen al área de concentración.