En el marco del próximo aniversario de los acuerdos de paz, la legisladora resaltó que el país está viendo repetir muchos de los patrones que también fueron causa de la guerra, como: opresión, falta de libertad de expresión y violaciones graves a derechos humanos.
El próximo 16 de enero El Salvador alcanza 31 años desde que terminó el conflicto armado. La firma de esos acuerdos de paz en 1992 marcó “el inicio de una democracia naciente”, afirmó la diputada Claudia Ortiz.
Empero, la legisladora consideró que “vale mucho la pena revisar qué ha pasado con ese anhelo democrático”, pues ciertamente este proceso “no logró cumplir la promesa de una vida con mayor dignidad y justicia”.
Señaló que de todas esas causas estructurales de la guerra ahora también “estamos viendo repetir muchos patrones que dieron inicio también al conflicto armado”, como la opresión, la falta de libertad de expresión, violaciones graves a derechos humanos, la situación económica y la injusticia social.
“Se mantienen con otras formas, con otros actores, pero de fondo las mismas situaciones”, dijo la diputada Ortiz.
Señaló que hay que ver con preocupación cómo el oficialismo no está abordando realmente esos problemas, y con las decisiones que ha tomado, genera otros.
“Importante que el pueblo marche, que la gente, que las organizaciones, que los movimientos, se manifiesten y no dejen de ser claros y contundentes en las calles ahora que hay muy poco o casi ninguna institución a la cual se pueda avocar la ciudadanía para defender sus derechos”, expresó respecto a las actividades que el movimiento social está organizando.
El 15 de enero, organizaciones civiles y sindicatos han llamado a congregarse en el parque Cuscatlán en conmemoración de los acuerdos que pusieron fin a la guerra y denunciar el actuar autoritario de la administración gubernamental.