Sonia Rubio, oficial de programa Sénior DPLF, mencionó en una entrevista en televisión que el Gobierno instrumentaliza su actitud y discurso por medio de las mismas instituciones del estado.
La oficina considera que el problema más grande que existe es que es una notoria persecusión por parte del gobierno a través de las instituciones.
“Hemos visto la utilización de la institucionalidad para perseguir a personas ya sea defensoras de derechos humanos o la labor periodística”, dijo.
Una de las alarmas es el retroceso social y político que se ha tenido, mencionó. “Estamos haciendo lo mismo que nos llevó a aquel escenario fatídico del conflicto armado”.
Agregó además que el problema principal es que en El Salvador invade la impunidad sobre cualquier crimen y violación a los derechos humanos a nivel nacional e internacional.