El legado del jesuita Jon Cortina, fundador de Pro-Búsqueda, sigue vigente en el corazón de esta asociación de víctimas de la guerra, quienes han prometido trabajar hasta el último día de sus vidas para encontrar a las niñas y niños que el conflicto arrebató del seno de sus familias.
La Asociación Pro-Búsqueda de Niñas y Niños Desaparecidos celebró 28 años de trabajo por la verdad, la justicia, la reparación y las garantías de no repetición con comunidades de cuatro zonas del país. Los festejos se desarrollaron el 30 y 31 de agosto pasado en San Vicente, Suchitoto, Guarjila y Morazán, dijo a VOCES una fuente de la organización.
Desde su fundación, el 18 de agosto de 1994, Pro-Búsqueda ha reunido a 463 personas con sus familias biológicas, y es la única organización civil en América Latina que administra sus propios perfiles genéticos para dar con el paradero de la niñez que fue desaparecida en el marco de la pasada guerra.
Blanca Lidia Gómez, secretaria de junta directiva de Pro-Búsqueda, declaró que “ha sido un caminar arduo” acompañando a madres y padres que buscan a sus hijos desaparecidos en el conflicto armado.

A las niñas y niños los “arrancaron de sus brazos”, afirma al resaltar que cada reencuentro es una alegría, un momento lleno de “emociones encontradas”.
“Dónde están y por qué se los llevaron” es una consiga con la que Pro-Búsqueda continúa su trabajo, la cual resume el componente de verdad, clave en la justicia transicional, una deuda que el Estado de El Salvador mantiene con las víctimas, pese a que ya transcurrieron 30 años desde que se firmó la paz.
María Santos Sorto, de la comunidad Huisisilapa en San Pablo Tacachico, La Libertad, afirmó que continúan en esta “lucha para encontrarlos”. Ella se acercó en la década de los 90 al padre Cortina y gracias a su trabajo lograron reencontrar en Honduras a su sobrina desaparecida en la guerra.
“Fue de los primeros niños y niñas encontradas”, comentó.
Sorto recuerda al jesuita que tuvo “ese gran corazón para ayudarnos a todas estas familias”.
No descansaremos “hasta encontrarlos” y seguiré apoyando a Pro-Búsqueda “hasta el último día de mi vida”, dijo con agradecimiento y compromiso.
