Por David Ramírez, periodista de VOCES
La jefa de oficina de ONU Mujeres en El Salvador, Miriam Bandes, señaló que durante la pandemia de COVID-19 la desigualdad y la brecha que existía incrementó y como resultado las mujeres se encuentran sufriendo impactos económicos, sociales y en salud.
“Desde el desempleo hasta la profundización de la violencia de género las mujeres y las niñas están sufriendo impactos sociales, económicos y de salud que deben abordase mediante intervenciones políticas específicas”, afirmó la diplomática en un foro organizado por el Parlamento Centroamericano (PARLACEN) en San Salvador.
Agregó que el impacto negativo a raíz de la crisis generada por la pandemia frente al COVID-19 a la ocupación y en las condiciones laborales de las mujeres de América latina y el Caribe generó “un retroceso de más de una década en los avances logrados en materia de participación laboral de acuerdo al informe especial de COVID-19 de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL)”.
Debido a esto, las mujeres salvadoreñas continúan enfrentándose a desafíos como a altas tasas de embarazos adolescentes, violencia, una minoría dentro de los espacios políticos, entre otros, explicó.
“Necesitamos un compromiso real para conseguir la igualdad de género que todavía no lo tenemos, hay intenciones, hay avances, pero no es suficiente y avanzar hacia la igualdad el cual es un derecho humano”, dijo