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El Juzgado 1º de Instrucción de San Miguel dictaminó apertura a juicio en el caso San Andrés, en el que se acusa a cuatro exintegrantes de un escuadrón de la muerte de asesinar a cinco civiles en 1981.
“Las pruebas han sido suficiente como para que el Juzgado 1º de Instrucción de San Miguel decrete la apertura a juicio y el caso vaya a vista pública”, aseveró David Morales, jefe de justicia transicional de Cristosal.
La audiencia preliminar finalizó el pasado 1 de febrero. Sin embargo, hasta el día de ayer, la jueza a cargo del caso dio lectura a su dictamen: apertura a juicio y avance a vista pública.
Morales aseguró que José Inés Benavides Martínez, Luis Alonso Benavides Polio y José de la Cruz Orellana ya están siendo procesados. Sin embargo, Ángel Aníbal Alvarado Benítez, el cuarto imputado, fue declarado rebelde por ausentarse.
El abogado y defensor de derechos humanos agregó que este caso sienta un precedente muy importante debido a que es la primera vez, tras la derogación de la Ley de Amnistía General, en la que un escuadrón de la muerte avanza a vista pública por un crimen de lesa humanidad.
Asimismo, al dar apertura a juicio en contra de este grupo el juzgado también sienta un precedente en los casos de crímenes de lesa humanidad y la no prescripción de los mismos.
David Morales explicó que este grupo paramilitar operó en el tiempo de la guerra con financiamiento de la Fuerza Armada en un contexto de graves y generalizadas violaciones a los derechos humanos.
