Según el Gobierno veracruzano, poco más de 340 personas procedentes de Honduras, Nicaragua, El Salvador y Haití permanecen en esta localidad.
La caravana de migrantes centroamericanos que se dirige a Estados Unidos descansó este miércoles tras cruzar disminuida y a paso lento la frontera del occidental estado mexicano de Veracruz, donde están custodiados por un fuerte dispositivo de seguridad.
Después de abandonar en la víspera el sureño estado de Oaxaca, los migrantes pasaron la noche en las comunidades de San Martín y Palo Dulce y fueron acompañados por la Guardia Nacional al centro del municipio de Jesús Carranza.
Según el Gobierno veracruzano, poco más de 340 personas procedentes de Honduras, Nicaragua, El Salvador y Haití permanecen en esta localidad después de que numerosos integrantes desistieran de la caravana, que llegó a congregar a 5,000 migrantes.
El motivo principal es que muchos de ellos han aceptado ofrecimientos de las autoridades de recibir tarjetas de visitantes por razones humanitarias y de residente permanente.
El contingente que permanece en la caravana pretende proseguir su camino hacia la Sayula de Alemán, pero todavía no ha concretado cuándo.
Autoridades estatales les ofrecieron apoyo médico a los migrantes, mientras que el Instituto Nacional de Migración (INM) reiteró su propuesta de visas humanitarias para que permanezcan en México y renuncien a ir a Estados Unidos.