La Cámara Ambiental de Segunda Instancia de Santa Tecla declaró nulas las medidas cautelares, dictadas en agosto de 2023 por parte del juzgado ambiental de San Salvador, en contra de cinco empresas que extraían material pétreo en el Cerrito de Quezaltepeque, La Libertad. Con estas medidas, dichas empresas estaban obligadas a cesar inmediatamente la explotación de la zona.
“ANÚLESE, la resolución proveída por la señora jueza Ambiental Interina de San Salvador (…) Y todo lo que fuere su consecuencia, por carecer de los elementos necesarios para decretar dichas medidas, por lo que se deja sin efecto las medidas cautelares ordenadas”, resolvió la Cámara según escrito con fecha de 19 de abril al que VOCES tuvo acceso.
Para las organizaciones ambientalistas y ecofeministas, las medidas cautelares dictadas en agosto de 2023 significaron motivo de celebración, puesto que, según estas, los daños al Cerrito de Quezaltepeque habían quedado en evidencia, así como la irreversibilidad de tales impactos. Sin embargo, más de siete meses después, estas medidas ahora son nulas.
De acuerdo con el escrito de la misma jueza que dictó dichas medidas, las cinco empresas estaban afectando, entre otras, los recursos naturales como el agua, el suelo, la biodiversidad, la atmosfera, el paisaje, así como la calidad de vida de las personas residentes en la zona. Entre las empresas responsables de estos daños, según resolución de las medidas cautelares, se encontraban la Peña S.A. de C.V., MEGABLOCK S.A. de C.V., PRECASA S.A. de C.V., Grupo Saltex y De la Roca.
La nulidad de estas medidas fueron producto de una audiencia de apelación el 19 de marzo de 2024, a la cual comparecieron algunos de los apoderados de las empresas mencionadas. Estas alegaron que la jueza ambiental de San Salvador no fijó hechos que individualizaran o determinaran las acciones u omisiones con las que las empresas estaban causando daño en la zona del Cerrito, la falta de justificaciones en el escrito derivada del informe técnico e inspección realizada por la misma, entre otras.
De acuerdo con la denuncia interpuesta por la Mesa Territorial del Foro del Agua de la Zona Norte de la Libertad, la cual dio paso a las medidas cautelares, la zona del Cerrito de Quezaltepeque ha sido explotada, incluso, desde la década de los setenta, pero que, desde las últimas dos décadas, estas actividades se intensificaron y masificaron aceleradamente. Según el espacio organizado, el número de familias afectadas directamente por tales actividades ascendían a las 2,300.
Con edición de Morena Villalobos