41 años han pasado desde la masacre de El Mozote y lugares aledaños y tres años desde las exhumaciones de la masacre en Cerro Ortiz, Morazán, para que familiares de víctimas de este crimen de lesa humanidad pudieran recibir y velar los restos de 10 parientes.
“Ha sido una espera, pero gracias a Dios valió la pena la espera y ahora ya vamos rumbo a la casa con ellos… han sido tres años de espera y hasta ahora se ha logrado lo que se quería”, expresó Fidel Pérez, uno de los familiares de víctimas, fuera de las instalaciones del Instituto de Medicina Legal (IML).
Cristosal, organización que acompaña el caso de la masacre de El Mozote y lugares aledaños, señaló que desde el pasado 9 de diciembre los familiares de las víctimas han estado esperando que el Juzgado de Instrucción de San Francisco Gotera ordenara a Medicina Legal la entrega de estas osamentas.
Las exhumaciones se realizaron en 2019, pero hasta días anteriores se esperó que el juzgado diera la orden de entregar las osamentas a los familiares.
“Se han entregado los restos de 10 víctimas. Van a ser trasladadas al caserío Yancolo, jurisdicción de Cacaopera, departamento de Morazán para realizar ese proceso de duelo por medio de la velación y el enterramiento que se va a realizar”, dijo Antonio Aguilar, abogado del equipo de justicia transicional de Cristosal.
La organización explicó que la comunidad de Yancolo en Cacaopera fue parte de la masacre del Cerro Ortiz, uno de los lugares aledaños de la masacre de El Mozote.
Los familiares de las víctimas aseguraron que este día, pese a los retrasos, harán una vela para despedir a sus seres queridos y el día de mañana serán sus entierros.