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Múltiples colectivos de estudiantes, docentes y defensores de derechos humanos mostraron un enérgico rechazo ante la actual situación económica que enfrenta la Universidad de El Salvador (UES) y el uso “abusivo” de sus instalaciones por parte de entidades del gobierno.
Sobre lo que enfrente la única universidad pública en El Salvador, los colectivos destacaron el adeudamiento por parte del gobierno de más de $50 millones, afectando el desempeño institucional, impidiendo renovación de equipos de tecnología, y más de 1,200 estudiantes que ya no recibirán becas económicas.
Subrayaron también que aún a la fecha, cuatro facultades universitarias del campus central de la UES no han sido devueltas, ni readecuadas por parte el Ministerio de Obras Públicas con base a cuerdos publicados. Esto, afirmaron, afecta a 22,396 jóvenes, es decir, el 41 % de la población estudiantil universitaria.
Asimismo, rechazaron la “abusiva” ocupación de las instalaciones de la UES por parte del Instituto Nacional de Deportes de El Salvador (INDES) y otras entidades. Recientemente también se hizo público un escrito por parte del Ministerio de Obras Públicas y Transporte (MOPT) hacia el rector de la UES, Juan Rosa Quintanilla, solicitando nuevamente espacios en dicho lugar para “albergar prensa nacional y extranjera por el periodo comprendido entre la última semana de mayo y primera semana de junio del presente año”, esto sin brindar más justificación.
“Estamos realmente indignados e indignadas por la actitud del gobierno actual que quiere anular todos los programas sociales, y quieren anular todos los servicios públicos, entre esos, la educación. La UES es una universidad que ha luchado por años para mantener garantía del acceso a la educación científica, cátedra libre y tratando de aportar hacia el verdadero desarrollo sostenible de nuestro país. Rechazamos totalmente esa actitud”, dijo Mirna Perla, del Colectivo de Derechos Humanos “Herbert Anaya” y abogada graduada de la Universidad de El Salvador.
Con edición de Morena Villalobos
