EE.UU. se ha convertido en uno de los países donde la brecha económica se ha incrementado exponencialmente por manipulaciones políticas e intereses corporativos.
Acceso a la salud, vivienda asequible, educación, nutrición y equidad salarial parecen ser una cosa del pasado en Estados Unidos; hoy por hoy, el ciudadano de a pie se debate entre la polarización política y los intereses corporativos que explotan el contexto socio económico. Mucho de ello ocurre a partir del Poder Judicial.
Este grupo de activistas y legisladores realiza un acto en frente de la Corte Suprema de Justicia. Según ellos, el legado trumpista persiste a través de sus jueces y conformación actual.
Estados Unidos se ha convertido en una de las economías más dispares en términos de distribución de capital. Analistas afirman que el ingreso actual del 90% de los hogares del país es menor a los ingresos familiares de 1973, esto en equivalencia relativa a las tasas de inflación.
Y a pesar de las esperanzas de que una administración demócrata realice los cambios pertinentes, lo cierto es que las promesas quedan nada.