La Corte Interamericana de Derechos Humanos (Corte IDH) recibió y escuchó a los familiares de Patricia Cuéllar y Julia Orbelina Pérez, quienes señalan al Estado salvadoreño por la presunta desaparición forzada de dichas personas.
“En el caso de Paty estaba antecedido por una serie de actividades de inteligencia militar y de operativos militares. En el caso de don Mauricio, el padre de Patricia y doña Julia Orbelina, si fueron accidentes, pero igual accidentes que no tenían por qué haber pasado. En tanto que ellos no tenían ninguna participación ni política ni con organizaciones”, sostuvo Francisco Álvarez, exesposo de Patricia, en su testimonio en calidad de víctima.
Según la acusación remitida a la CorteIDH por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), el caso se refiere a la alegada responsabilidad internacional del Estado salvadoreño por la desaparición forzada de Patricia Emilie Cuéllar Sandoval, Mauricio Cuéllar Sandoval y Julia Orbelina Pérez, así como por la falta de investigación y la impunidad en que se encuentran los hechos.
Álvarez, además, señaló al coronel retirado Jorge Eduardo Morán Recinos como sospechoso de ser el responsable del operativo militar en el que su esposa fue capturada de manera arbitraria y desaparecida.
Mientras tanto, Ana Gladis Pérez de Castro, hija de Julia Orbelina Pérez, relató el sufrimiento que le ha causado desconocer el paradero de su madre, quien era su apoyo. Ana Gladis ahora padece de depresión crónica.
Según información que se encuentra en los archivos de la Fuerza Armada de El Salvador (FAES), Morán perteneció a la sección de inteligencia de la Policía de Hacienda, siendo uno de los jefes de la Unidad y teniendo rango de capitán.
Por otra parte, el representante del Estado, Andrés Guzmán, aseguró que El Salvador está comprometido a hacer «todo lo posible» por encontrar a las personas desaparecidas y brindar apoyo a los familiares.
Patricia Emilie Cuéllar Sandoval era colaboradora de movimientos cristianos desde 1975 y se desempeñaba como secretaria de la Oficina del Socorro Jurídico Cristiano. Entre agosto y septiembre de 1978, aproximadamente 50 agentes de la Policía Nacional, vestidos de civiles y fuertemente armados, allanaron su casa. Luego, el 5 de julio de 1980, varios agentes de seguridad y de la Fuerza Armada de El Salvador (FAES) allanaron su trabajo.
El 27 de julio de 1982, un día antes de la fecha que se cree fue su desaparición, Patricia fue a las oficinas de Socorro Jurídico Cristiano para denunciar una persecución en su contra. En la noche del 28 de julio de 1982 y la madrugada del día siguiente, Mauricio Cuéllar, padre de Patricia y Julia Orbelina Pérez, quien era empleada del servicio doméstico, fueron sacados violentamente del hogar de Cuellar en la colonia Escalón. Sus vecinos dijeron que unos 10 elementos del Ejército saquearon la casa en un pick up azul y un jeep verde.
Por el momento, está pendiente la hora y fecha en que la Corte IDH notifique la resolución de convocatoria a audiencia pública, alegatos y observaciones finales sobre el caso.